Bosques de coníferas, bosques de pino, bosques de abeto u oyamel, bosques de ayarín, bosques de cedro y táscate, bosques de encino y bosques mixtos de pino y encino.
Son comunidades dominadas por árboles altos mayormente pinos y encinos acompañados por otras varias especies habitan en zonas montañosas con clima templado a frío. México contiene el 50% (50 especies) de especies de pinos del mundo y cerca del 33% (200 especies) de encinos. Se estima que los bosques templados contienen cerca de 7,000 especies de plantas. A pesar de que la mezcla de especies puede variar entre uno o varios pinos y algunos encinos, son comunidades siempre verdes. Existen otras variantes donde dominan algunas otras coníferas, como los bosques de oyamel, los de ayarín o pinabete y otros.
Se distribuyen en mayor grado en el norte y sur de Baja California, a lo largo de las Sierras Madre Occidental y Oriental, en el Eje Neovolcánico, la Sierra Norte de Oaxaca y en el sur de Chiapas. En altitudes entre 2,000 y 3,400 m. Los bosques templados ocupan actualmente el 16% del territorio mexicano (323,300 km2).
Se desarrollan en zonas con temperaturas promedio entre 12 y 23°C, aunque en invierno la temperatura puede llegar hasta por debajo de cero grados. Son ecosistemas de subhúmedos a templado húmedos, con una precipitación anual entre 600 y 1,000 mm. Crecen sobre suelos muy variados desde limosos a arenosos y moderadamente ácidos, por lo general con abundante materia orgánica y hojarasca.
En los bosques templados hay una gran diversidad de árboles aunque dominan las especies de pinos y encinos.
Algunos pinos comunes son Ocote blanco (Pinus montezumae), Ocote chino (Pinus oocarpa), Ocote pardo (Pinus hartwegii), Pino cedrón (Pinus pringlei), Acahuite(Pinus ayacahuite), Pino chimonque (Pinus leiophylla), Pino chino (Pinus teocote),Pino lacio (Pinus pseudostrobus), hortiguillo (Pinus lawsoni), Pino loco (Pinus cembroides) y Ocote colorado (Pinus patula). En algunas regiones crecen también el abeto (Abies religiosa), el Ayarín (Pseudotsuga menziesii) y varias especies de Táscate (Juniperus deppeana, J. flaccida, etc.), y los Pinabetes (Abies duranguensis, A. religiosa).
Hacia las partes más bajas de las montañas los pinos se van mezclando con encinos, algunos de los más comunes el Encino barcino (Quercus magnoliifolia), Encino blanco (Quercus candicans), Encino colorado (Quercus castanea), encino cucharo (Quercus urbanii), Encino laurelillo (Quercus laurina), Encino quebracho (Quercus rugosa), Encino prieto (Quercus laeta, Quercus glaucoides), Encino tesmilillo (Quercus crassipes), Escobillo (Quercus mexicana), Roble (Quercus crassifolia) y Encino rojo (Quercus scytophylla), entre otros.
Otras especies de árboles que habitan en estas comunidades son Madroño (Arbutus xalapensis), Tepozán (Buddleja americana), Jaboncillo (Clethra mexicana) y Saucillo (Salix paradoxa).
Los bosques templados son comunidades con un estrato bajo muy escaso. En algunos sitios se desarrollan pequeños manchones de matorrales compuestos por manzanita (Acrtostaphylos pungens), Arrayán (Gaultheria acuminata), Palo de rosa (Bejaria aestuans), Jara (Baccharis heterophylla), Tlaxistle (Amelanchier denticulata), Laurel (Litsea glaucescens), Lentrisco (Rhus virens), Cabellos de ángel (Calliandra grandiflora), Capulincillo (Miconia hemenostigma), Nanchillo cimarrón (Vismia camparaguey), y varias hierbas como Hierba de Carranza (Alchemilla pectinata), Najicoli (Lamourouxia viscosa), Alfalfilla (Lupinus montanus), Hierba dulce (Stevia lucida), Helechos (Dryopteris spp.), Cantaritos (Penstemon spp.), Hierba del sapo (Eryngium sp.) y otras. También Abrojo (Acaena elongata), Té de monte (Satureja macrostema), Helecho cilantro (Asplenium monanthes), Hierba del golpe (Oenothera speciosa) habitan en el sotobosque.
Las epífitas no son comunes pero algunas bromelias y orquídeas crecen en pinos o encinos sobre todo en sitios muy húmedos. Puede haber cientos de especies de hongos entre ellas el Hongo de borrego (Russula brevipes), Hongo de yema (Amanita caesarea), Matamoscas (Amanita muscaria), Hongo cemita (Boletus edulis) y Duraznillo (Cantharellus cibarius).
Habitan también Venado cola blanca (Odocoileus virginianus), Lince (Lynx rufus), Puma (Puma concolor), Armadillo (Dasypus novemcinctus), Tlacuache (Didelphis virginiana), Zorra gris (Urocyon cinereoargenteus), Mapache (Procyon lotor), Conejo serrano (Sylvilagus floridanus), Ardilla voladora (Glaucomys volans), Ardilla gris (Sciurus aureogaster) y Coatí norteño (Nasua narica).
Las Serpientes de cascabel (Crotalus basiliscus), Víbora cascabel cola negra (Crotalus molossus), Vibora cascabel transvolcánica (Crotalus triseriatus) se alimentan de pequeños mamíferos que abundan en estos bosques. Son el hábitat preferido del Clarín jilguero (Myadestes occidentalis) y el Azulejo garganta azul (Sialia mexicana), además de pájaros carpinteros como Carpintero mayor (Picoides villosus) y Carpintero bellotero (Melanerpes formicivorus) y de algunas rapaces como águila real (Aquila chrysaetos), Aguililla cola roja (Buteo jamaicensis), Cernícalo americano (Falco sparverius), Gavilán pecho rojo (Accipiter striatus). También es refugio de numerosas aves migratorias como los chipes (Setophaga spp.), el Zumbador rojo (Selasphorus rufus) y el Colibrí garganta rubí (Archilochus colubris).
En bosques templados también habitan de gran variedad de insectos. En los bosques templados de oyamel del centro de México se encuentran los sitios de hibernación de la Mariposa monarca (Danaus plexippus). Algunas de las especies más sobresalientes de insectos son los escarabajos del género Plusiotis que habitan bosques húmedos, templados a fríos. En los ríos de las montañas habitan varios peces particulares de México como pintito de Tocumbo (Chapalichthys pardalis), Picote tequila (Zoogoneticus tequila), Picote (Zoogoneticus quitzeoensis), Tiro de Zacapu (Allotoca zacapuensis), Pintada (Xenotoca variata) y Chegua (Alloophorus robustus) entre varios otros de la familia de mexcalpinques (Godeidae), que son endémicos de México y se encuentran en peligro por la escases de sus poblaciones.
Retienen el agua de lluvia, facilitan que se infiltre al subsuelo y se recarguen los mantos acuíferos. Disminuyen la erosión al reducir la velocidad del agua y sujetar la tierra y reducen el riesgo de inundaciones. En el proceso de fotosíntesis los árboles, como todas las plantas, capturan dióxido de carbono y devuelven oxígeno. Ofrecen multitud de hábitats distintos para gran variedad de seres vivos. Además proveen de una variedad de productos del cual la madera es muy importante.
El principal impacto ha sido la tala de grandes extensiones para el desarrollo de la agricultura, industria maderera, obtención del ocote, además también se han utilizado para el pastoreo extensivo. Son afectados por incendios forestales, cambio de uso de suelo para agricultura o ganadería, cacería de subsistencia y tráfico ilegal de fauna. Son afectados por el cambio climático.
Se calcula que para el 2003 se había perdido cerca del 27% de los bosques de coníferas y de encinos que ocupaban el país. Los estados donde estos ecosistemas se encuentran más protegidos oficialmente son: el Distrito Federal, Chiapas, Querétaro, Hidalgo y Michoacán. Durante el siglo veinte, el aprovechamiento forestal no sustentable, la tala ilegal, los incendios, el reparto agrario y el fomento agropecuario fueron los factores más importantes de destrucción del bosque.
El aprovechamiento forestal está regulado por la Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable de México. Este ecosistema tiene gran valor para la vida de la migración de la Mariposa Monarca ya que ahí se realiza parte de su ciclo de vida por lo cual se ha declarado una Reserva de la Biósfera.